Beneficios del transporte, almacenamiento y entrega de mercancías

Debido a la gran importancia que tiene ejecutar de forma correcta el transporte, el almacenamiento y el movimiento de productos, se ha vuelto fundamental recurrir a herramientas que ayuden a mejorar los procesos de logística, entre ellos el almacenaje y la distribución.

Entre los beneficios tenemos:

• Al ejecutar una mejor gestión de pedidos, mejora el servicio a los clientes:

Al mejorar la gestión del almacén, una empresa puede ser más competitiva, conseguir una mayor satisfacción del cliente y así lograr un mayor número de ventas.

• Reducir tareas administrativas

Llevar a cabo una gestión de almacén coherente, estandarizada y eficaz ayudará a reducir la carga de trabajo y ganar en productividad.

• Reducción de costos de almacén

Si los productos están mejor distribuidos y aprovechan mejor el espacio, se reducen las pérdidas o deterioros de productos.

• Ayuda a cumplir unos estándares de calidad

Gestionar un almacén de forma correcta permite mantener la cadena de valor de un producto y ajustarse a todas las regulaciones y estándares de calidad a los que está comprometido.

Hay muchos sistemas de almacenamiento y cada uno de ellos tiene sus propias ventajas respecto a los productos a los que está destinado. Previamente a elegir un sistema de almacenamiento  las empresas dedicadas al almacenaje deben evaluar cuestiones como el coste de inversión, el costo y la capacidad de manipulación y el índice de utilización del suelo.

Es por ello que las empresas pueden diseñar un sistema de almacenamiento que reporte a sus clientes un servicio eficiente con valor añadido y a un precio competitivo. Pero para ello también será necesario contar con un buen sistema de gestión de stock que permita mover rápidamente las mercancías.

Es allí donde entra el transporte que para que pueda cumplir su cometido principal lleva a cabo un conjunto de actividades que se agrupan en las siguientes:

• Transporte del producto

Determinación de los medios materiales (camión, ferrocarril, avión, barco, entre otros medios) a utilizar y plan de rutas a seguir para mover el producto desde el punto de origen al del destino.

• Manejo de materiales

Determinación de los medios materiales (carretillas, cintas transportadoras, entre otros) y procedimientos para mover los productos dentro y entre almacenes y locales de venta de la propia empresa.

• Embalaje

Elección de los sistemas y formas de protección y conservación de los productos: papel, plástico, cajas de cartón o de madera, entre otros.

• Procesamiento de los pedidos

Incluye todas aquellas actividades relativas a la recepción, comprobación y transmisión de órdenes de compra.

• Almacenamiento

Selección del emplazamiento, dimensión y características (refrigeración, automatización, entre otros) de los almacenes en los que se deben guardar los productos.

La distribución supone un conjunto de decisiones complejas e interrelacionadas que requieren una adecuada planificación.

Es muy importante que los gerentes logísticos se den cuenta lo fundamental que es integrar el almacenaje y la distribución en la elaboración de sus estrategias para mantenerse a niveles competitivos y de que éstos son una forma de encontrar puntos donde se pueden lograr ventajas comerciales y mayores niveles de satisfacción de los clientes.